lunes, 28 de octubre de 2013

11. Decir que NO.

Leí a la señora Ch. en el posteo anterior e inevitablemente me puse a pensar en mis dificultades para establecer límites en la relación con otros. Es cierto que algún avance he tenido en esta dirección, pero siempre es bueno recordar donde aprieta el zapato y no hacerse la remolona.

De lo que aprendí hasta este momento, puedo compartir que para decir que NO:

Se necesita claridad de lo que uno quiere y necesita.
Se necesita saber lo que es un límite.
Se necesita seguridad.
Hay que entender que es posible hacerlo sin perder al otro.
Se necesita de una contraparte que esté dispuesta a aceptar un no como respuesta y/o la firmeza necesaria para sostener el NO pese a la falta de empatía, sordera, insistencia u otra forma de resistencia que surja en el camino.






1 comentario: