viernes, 1 de noviembre de 2013

13. Problemas de las señoras madres.

Mientras nosotras estamos entrando en la época de ser señoras, nuestras madres están entrando en la época de ser señoras mayores. Ya no me parece tan difícil entender lo que  les pasa en el cuerpo, porque sólo tengo que multiplicar lo que me pasa a mí por dos, siendo el resultado en un poco agobiante.
En el alma se hace un poco más complejo el ejercicio de la empatía. Yo no tengo hijos, no sé lo que se siente esperarlos, parirlos, criarlos, verlos crecer, caerse, equivocarse, sufrir, ser felices, progresar, retroceder... irse, enamorarse, alejarse.
Estas han sido unas semanas difíciles para mis dos señoras madres más cercanas, mi madre y mi suegra. Ambas por uno u otro motivo se han visto sometidas a una gran presión, a un cansancio y frustración del demonio, a la sensación de que no hay salida, de que hay que seguir adelante con mochila y todo, aunque no se tengan ganas y aunque nadie recompense ese esfuerzo lo necesario. Están sufriendo por que sus hijos les recuerdan sus propios errores o porque sus hijos de desvían del camino. Están sufriendo porque además ven que ya no tienen la misma energía que antes, todo se hace más cuesta arriba y no visualizan en el corto plazo un alivio. Han vivido existencias difíciles y la cosa no parece cambiar para bien.
Hoy estoy preocupada y triste por nuestras madres. Me siento culpable porque en medio de la tormenta, me espera un avión que me llevará a las más preciadas vacaciones y no puedo dejar de pensar que las que debieran abordar el avión son ellas.

1 comentario:

  1. que penita... hoy mi papá cumplió 70 años... me acordé de este post... mañana lo comento con más detalle...

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